La concejal delegada de Obras y Servicios Operativo, Mamen Beato, explicaba que desde que se tuvo conocimiento del hundimiento de esta acera, el pasado mes de agosto, se actuó con la mayor premura posible. En este sentido, argumentaba que se contrató un estudio geotécnico para estudiar el hundimiento del acerado y se procedió a tapar los imbornales con una capa de asfalto. Ante el hundimiento aún mayor de la calzada se procedió a decretar la emergencia y la empresa Acedo, adjudicataria de los trabajos junto con el Ayuntamiento, están realizando las obras con la mayor celeridad posible.
Según Beato, esta situación afecta a una vivienda unifamiliar que podría ser declarada en ruinas. Para solucionar la situación de la vía, anunció que se realizará una renovación del saneamiento con inyecciones de mortero para conseguir hacer el suelo más duro.