El Palacio de los Condes de Santa ha acogido de presentación para el informe ‘Innovación y competitividad en las Pymes cordobesas’ elaborado por la Asociación de Fabricantes y Empresas de Servicios de Córdoba (ASFACO), con la gestión técnica de Bottom Consultores, gracias a un convenio de colaboración suscrito con la Diputación de Córdoba.
Ante un grupo de empresarios lucentinos, los responsables del informe han explicado que se trata de un exhaustivo estudio de análisis que refleja tanto la situación actual del tejido empresarial cordobés como de una serie de conclusiones y recomendaciones, con objeto de fomentar la familiarización e introducción de la innovación en las pymes de la provincia.
El alcalde de Lucena, Juan Pérez, agradecía la elección de la ciudad por parte de los redactores del informe y la Diputación, para llevar a cabo la presentación de un documento que “conviene tener en cuenta para analizar el campo de mejora de nuestras empresas y en el caso concreto de Lucena, para ratificar la necesidad por innovar especialmente de las empresas vinculadas a los sectores tradicionales”.
Para la diputada provincial de Consumo y Participación Ciudadana, Aurora Barbero, “el informe nos pone en el camino de apoyar a las pequeñas y medianas de empresas de nuestra provincia a la hora de innovar”, pues “porque si no supone poco esfuerzo abrir todos los días levantar la persiana, la innovación además supone un esfuerzo añadido”.
Por su parte, la secretaria general de Asfaco, María José Rubio, informaba de que “cualquier cambio, aunque sea una pequeña actuación en imagen, ya es innovar y para eso las empresas necesitamos el apoyo de las administraciones y de toda la sociedad para seguir creciendo”. Rubio, destacó que actualmente sólo el 8 por ciento de las empresas cordobesas invierten en innovación.
El director de Bottom Consultores, Leónidas Cabrera, desgranaba los resultados del estudio, el cual se ha basado en más de sesenta entrevistas personales con empresarios cordobeses, lo que ha determinado que “para más del 74 por ciento de los entrevistados existe una clara diferenciación entre los conceptos de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), si bien un 12 por ciento de los empresarios objeto de la muestra perciben la innovación como una posibilidad fuera de alcance, debido principalmente a una incorrecta concepción de la misma. Identifican la innovación con la innovación tecnológica, con la inversión en tecnología para la modificación y creación de nuevos productos”.
En cuanto a conclusiones, el estudio recoge que un 33 por ciento piensa que la investigación y el desarrollo de nuevos conceptos, productos o servicios está reservado a las grandes empresas, a las universidades y a los consorcios de colaboración público-privada.
Según el informe, en los últimos tres años, el 26,7 por ciento de las empresas entrevistadas de 10 o más empleados fueron innovadoras, teniendo en cuenta tanto las innovaciones tecnológicas, como las no tecnológicas. El porcentaje obtenido es sensiblemente inferior a la media de empresas con el mismo perfil a nivel nacional (28,9 por ciento).
El 11,6 por ciento de la muestra, también con 10 o más empleados, fueron innovadoras tecnológicas y el 23,3 por ciento fueron innovadoras no tecnológicas en el mismo periodo. Por sectores, el 41 por ciento de las empresas entrevistadas pertenecen al sector de la producción, el 32 por ciento a la comercialización y distribución y el 27 por ciento a la prestación de servicios.
El estudio recoge que el 65 por ciento de los entrevistados es favorable a establecer lazos de cooperación con empresas del sector, proveedores y clientes principalmente, aunque tan sólo los hace efectivos el 8% de los entrevistados. Estos datos ponen de relieve que es necesario que desde las administraciones no sólo se realice una campaña de sensibilización y motivación hacia la innovación en las micro y pequeñas empresas sino que se fomente la necesaria cooperación entre las mismas como única herramienta para su sostenibilidad en mercados globalizados altamente competitivos.