El Ayuntamiento de Lucena y la empresa adjudicataria de las obras han firmado este jueves el acto de replanteo que marca el inicio de la intervención
Las obras del soterramiento de la red eléctrica existentes sobre la parcela donde se tiene proyectada la construcción del hospital de Lucena comenzarán durante el próximo mes de enero, una vez que este jueves Ayuntamiento de Lucena y Elecnor Servicios y Proyectos, empresa adjudicataria, han firmado el acto de replanteo.
Con un plazo de ejecución de cuatro meses, esta intervención consiste en dar continuidad al trazado subterráneo de la Línea 132 kV “Baena – Iznajar” de alta tensión, desde la urbanización de El Cahiz hasta la carretera CV-218, de modo que quede libre el terreno del futuro centro hospitalario. La obra se desarrollará sobre el margen derecho de la carretera N-331 y conlleva la creación de dos cámaras de empalme, en ambos extremos, y el soterramiento de unos 215 metros de tendido eléctrico.
La adjudicación del contrato a favor de Elecnor se realizó en enero de 2023 con un presupuesto de 694.907 euros, si bien fue después cuando técnicos de Endesa y del propio Ayuntamiento entendieron que, para su mejor ejecución, era necesario variar parcialmente el trazado de la nueva línea subterránea, generando una modificación de contrato que se resolvía finalmente el pasado mes de octubre con un incremento en el coste económico hasta los 772.845 euros.
“La tramitación de este expediente ha sido compleja por ser una infraestructura eléctrica importante y por el entramado de autorizaciones que existe alrededor de esta obra”
Por parte municipal, el concejal de Obras e Infraestructuras, Javier Pineda, ha sido el encargado de rubricar el acta de replanteo que marca el inicio administrativo de la obra. “La tramitación de este expediente ha sido compleja por ser una infraestructura eléctrica importante y por el entramado de autorizaciones que existe alrededor de esta obra, pero por fin parece estar todo encauzado para que las obras puedan comenzar en unas semanas”, ha afirmado.
La eliminación del tendido eléctrico en vuelo y su instalación bajo tierra es el último requisito que debe asumir el Consistorio lucentino antes de que la parcela, cedida en su día a la Junta de Andalucía, quede disponible para el inicio de la actividad edificadora.
