Con los votos en contra de PSOE e Izquierda Unida, el pleno del Ayuntamiento de Lucena rechazaba la moción presentada por el Partido Popular para endurecer la legislación estatal por okupación de viviendas.
El portavoz de Izquierda Unida, Miguel Villa, abogaba por defender el derecho a la vivienda digna frente a la criminalización de las personas que okupan una vivienda porque no pueden acceder a ella. Según Villa, se trata de un problema de las administraciones que no han sido capaces, dijo, de dar respuesta a este gran problema. El concejal de Izquierda Unida argumentó que en España existen 18 millones de viviendas, de las que 4 millones están vacías y la mayoría de ellas pertenecen a fondos de inversión. Según Villa, en nuestro país, sólo hay 14.000 viviendas ocupadas.
El edil de Izquierda Unida solicitaba poner el énfasis en solucionar el problema del precio de las viviendas y de las mafias de okupación, aunque dejando que en este asunto los que trabajen sean los diputados del Congreso.
Desde Vox, Antonio Hidalgo explicaba que siempre van a apoyar a los propietarios rente a los okupas, y solicitaban el endurecimiento del código penal.
Jesús López, portavoz de Ciudadanos, agradeció al PP la valentía de llevar al pleno una moción, dijo, que volvería a ser tumbada, ya que el Partido Socialista, vaticinó, no apoyará ninguna ley que le quite poder a los okupas.
Por su parte la concejal delegada de Servicios Sociales, Carmen Gallardo, manifestó que en Lucena el problema que existe no es de okupaicón sino de convivencia. En este sentido, informó de que todas las viviendas okupadas actualmente en Lucena pertenecen a entidades bancarias o fondos buitres que no interponen la correspondiente denuncia. Para votar a favor de la moción, el PSOE, puso condición que se incluyesen dos enmiendas: instar a la Junta de Andalucía a aumentar el parque de viviendas públicas y adecuar la normativa vigente.
La concejal del PP, Charo Valverde, argumentaba que dichas enmiendas no se podían enmarcar dentro del espíritu de la moción, por lo que no fueron aceptadas. Finalmente el punto no salió adelante debido a que PSOE e Izquierda Unida votaron en contra.
Sí quedó aprobada por unanimidad la moción presentada por Vox, y que solicitaba el inicio de un estudio y posterior implantación de energías renovables en los edificios municipales. Estas placas, según el portavoz de Vox en el Ayuntamiento, se instalarían también en los colegios de la ciudad, con una superficie total de 23.000 metros cuadrados.
La moción incluía también la bonificación del ICIO o IBI para fomentar esta instalación entre particulares, algo que finalmente fue desestimado.
Desde Vox argumentaban que con este tipo de instalaciones, se podría conseguir un ahorro máximo de algo más de 300.000 euros en un solo año, e incluso superior, teniendo en cuenta que los precios actuales de la electricidad son superiores a los de los últimos ejercicios.