Los profesionales afirman que las demoras en atención primaria de Lucena son las más altas, que sufren episodios de violencia física y verbal y que las instalaciones necesitan una renovación profunda y completa.
Los trabajadores del SUAP de Lucena han emitido una carta en la que denuncian que la situación de desbordamiento que ha atravesado estas últimas semanas el servicio no es un hecho puntual, si no un fenómeno que se repite invariablemente todos los años con la llegada de las altas concentraciones de polen. Desde hace años, junto el repunte de patología respiratoria del invierno, estas son nuestras dos épocas de alta frecuentación. Este año en ambos periodos hemos superado durante varias jornadas los 250 usuarios atendidos en 24 horas (con un pico diario de más de 300), sin olvidar los avisos del equipo móvil y el importantísimo volumen de pacientes pediátricos que atendemos, lo cual representa una sobrecarga inasumible para los trabajadores, que estos días vemos desmoronarse los frágiles cimientos sobre los que está concebido nuestro servicio.
Un año más se pretende que nuestro servicio asuma la sobredemanda de una atención primaria que presenta las demoras más altas que hayamos conocido, inéditas en otros pueblos o ciudades de nuestro entorno, que con frecuencia superan las 3 semanas para una cita con el médico de familia, de manera reiterada año tras año. Entendemos que las bajas, permisos e incidencias que se producen en el personal médico no tienen por qué ser diferentes de las de otros lugares. Entonces, ¿por qué las demoras en primaria en Lucena son de las más altas que conocemos? ¿Por qué año tras año se repite la misma situación sin que se tomen medidas, sin compromisos de soluciones a largo plazo e incluso sin que se reconozca el problema por parte de nuestros representantes?
En cuanto a los avisos del equipo móvil, poco se habla sobre los avisos en cola, que mantienen en la calle a la UVI móvil durante horas y ocasionando tiempos de espera en prioridades totalmente sobrepasados de las recomendaciones, lo cual se ha traducido, en los casos más extremos, en pacientes fallecidos sin recibir asistencia, situaciones que permanecen silenciadas y en el anonimato desde hace años, y de las cuales los trabajadores podemos dar testimonios concretos. ¿Cómo se pueden permitir estas realidades en la misma localidad en que se ubica una de las bases del 061 con menos activaciones de toda Andalucía?
Este caldo de cultivo es perfecto para que se vea comprometida la seguridad del paciente, y la del propio trabajador. De esta forma, el desconocimiento y la incomprensión de algunos usuarios les lleva a buscar responsabilidades en los trabajadores que tienen delante, produciéndose con mucha frecuencia gritos, amenazas, descalificaciones o faltas de respeto al personal de guardia, quedando estos y el resto de usuarios totalmente vulnerables ante situaciones de violencia física o verbal. Mientras en otras administraciones públicas, como ayuntamientos, sedes judiciales o servicios de empleo cuentan con guardias de seguridad, ¿cómo es posible que en un lugar tan sensible y tan masificado como es el único servicio público de urgencias de nuestra ciudad no contemos con uno desde hace años?
Desde hace años, la mayor localidad del AGS Sur de Córdoba, que duplica en población a ciudades como Cabra o Montilla, presta sus servicios de urgencias de proximidad en un espacio que no reúne unas mínimas condiciones de habitabilidad, un espacio de un edificio que no fue concebido con este propósito, en un semisótano que pretende abarcar unas dependencias, incluyendo despachos, dormitorios y almacenes que no puede contener físicamente.
Esta situación solo ha podido permanecer en el tiempo gracias a que sus profesionales, fijos o temporales, se han ido renovando en numerosas ocasiones a lo largo de los años, y haciendo recaer todas las deficiencias de urgencia extrahospitalaria sobre la salud de los lucentinos, en forma de demoras, consultas rápidas y ambulancias que no llegan a tiempo. El SUAP Lucena necesita una renovación profunda y completa a todos los niveles y la lleva necesitando desde hace años. ¿Hasta cuándo vamos a permitir esta indiferencia?
