Según fuentes de la Policía Local en los meses de abril a agosto incluidos, el número de denuncias en materia de higiene urbana han sido 10, mientras que en el caso de vertidos han sido 6 las sanciones impuestas, incluyendo vertidos al río. Estas fuentes policiales añaden que se trata de un tema nada fácil de solucionar ya que hay que sorprender a quienes ejercen estas prácticas de manera infraganti o demostrarlo a través de documentación que pueda encontrarse en el caso de los vertidos fuera de los contenedores, algo que estas personas sí que tienen en cuenta cada vez más a la hora de dejar sus bolsas de basura fuera.
Desde el ayuntamiento de Lucena se mantiene activa su campaña de control de limpieza en la vía pública, algo que parece no llegar a la ciudadanía, pues siguen aumentando los vertidos incontrolados de basura y escombros en distintos puntos de la ciudad. Así, en zonas de segunda residencia de verano poco iluminadas, como Los Poleares, Campo de Aras o el Plan Oeste-1, los vecinos aprecian un crecimiento en los vertidos incontrolados de escombros, chapas de amianto, electrodomésticos, muebles y enseres ya en desuso. Es este sentido, la ciudadanía reclama que se intensifiquen los controles de la Policía Local en estas zonas donde el depósito continuado y reiterado de basuras y enseres en el entorno de los mismos hacen que aumente el número de ratas y animales abandonados.
El concejal de Seguridad Ciudadana, Francisco Adame, al inicio de la campaña hacía un llamamiento en el que informaba de que «estas acciones de control vienen a reforzar las tareas de sensibilización de limpieza viaria impulsadas por la Delegación de Medio Ambiente con la campaña No dejes tu huella». Insistía en que «se trata de una campaña preventiva que no busca el fin recaudatorio al imponer sanciones, sino llegar al fondo del problema, es decir, concienciar al ciudadano para que se comprometa con la limpieza que una ciudad como Lucena merece».
La campaña de la Policía Local estará vigente durante el verano y en ella participan patrullas de agentes vestidos de paisano para asegurar el cumplimiento de las ordenanzas municipales tanto por la ciudadanía en general como por los propietarios de los establecimientos. Además, los agentes vigilan la limpieza de las terrazas, el depósito de residuos y basuras fuera de los contenedores habilitados, la recogida de los excrementos de los animales y, también, la revisión de documentación vigente en el caso de tener animales peligrosos.
