Un ex del Puente Genil F.C, Adrián Ruiz fue el elemento desequilibrante en un intenso y emocionante derbi provincial que enfrentó al equipo pontanés y al C.D. Ciudad de Lucena. Como se podía presagiar por todos los condicionantes que rodeaban este partido, ambos equipos se tenían muchas ganas, y ya en el arranque del choque, la intensidad de ambos auguraba un duelo apasionante entre dos aspirantes al ascenso.
En el primer cuarto de hora, al equipo lucentino le tocó sufrir ante la presión constante de los locales. Sin embargo, la primera ocasión clara fue para Víctor Morillo que remató de cabeza un buen centro de Michael Conejero; el guardameta Álvaro evitó el gol celeste. Minutos después llegó la respuesta del Puente Genil en un pase interior de Salva Vegas y posterior remate de Ezequiel que consiguió despejar con el pie Álex Lázaro. Con una oportunidad para cada equipo se llegó al descanso después de una intensa primera parte.
En el segundo asalto, el ritmo siguió siendo alto aunque las fuerzas fueron haciendo mella en los dos equipos. En el duelo entre pontaneses y lucentinos se imponían claramente las defensas, sin embargo, la posesión y el control en el juego fue cayendo del lado lucentino hasta que Pablo Gallardo ve la segunda cartulina amarilla del partido y tiene que abandonar el terreno de juego a falta de 18 minutos para el final.
A partir de ese momento, muchos podían pensar que el Puente Genil lo iba tener más fácil para llevarse el derbi pero, de una recuperación de Michael Conejero parte la jugada decisiva del encuentro ya que, Guille Roldán le mete un balón a Juan Delgado, éste pone un centro que se envenena y toca en el travesaño; el rechace lo recoge Víctor Morillo y lo cede atrás para que Adrián Ruiz de un fuerte zapatazo estrelle la pelota en el travesaño de la portería de Álvaro que no puede evitar el golazo del mediocentro del Ciudad de Lucena.
Un auténtico jarro de agua fría para un Puente Genil que, a partir de ahí, no le quedaba otra que volcarse a la desesperada en busca del empate. Un gol que pudo llegar en el minuto 85 de partido en un remate de cabeza de Ezequiel que fue anulado por fuera de juego.
Al final, triunfo lucentino en el fortín del Manuel Polinario que, no sólo supone sumar 3 puntos más, sino lo que le das un golpetazo a un rival directo, el subidón anímico tras ganarle a un equipo de la máxima rivalidad y encima recuperar el liderato del Subgrupo B dentro de un Grupo X de la Tercera División donde el C.D. Ciudad de Lucena ha terminado este año como el mejor equipo en el computo global de puntos.