El Ayuntamiento de Lucena ha aprobado este martes, mediante un nuevo decreto de Alcaldía, otro paquete de medidas dirigidas a limitar la movilidad en la ciudad con el fin último de ayudar a contener la propagación de la covid-19 en la ciudad, cuyos datos de casos positivos y fallecimientos continúa en aumento a tenor de las estadísticas que a diario publica la Consejería de Salud (visitar enlace).

A fin de evitar concentraciones de personas, se ha decretado este martes a través del decreto firmado por Juan Pérez, la suspensión de las actividades y talleres de participación ciudadana que se venían realizando de manera presencial en los Centros Sociales Municipales, la clausura de las fuentes de agua potable existentes en la ciudad y los aseos públicos y el cierre del Paseo de Rojas entre las 23:00 y las 7:00 horas. El comercio itinerante queda prohibido.

En edificios municipales, las principales novedades vienen dadas por la reducción de 9 a 14 del horario de apertura de las salas de estudio de la Biblioteca Municipal, que no podrá abrir los espacios infantiles y que volverá a cerrar los soportes de la actividad libros libres, así como por la limitación a 15 minutos la presencia en el Ayuntamiento para las visitas presenciales no concertadas previamente.

En el Mercado Municipal, se cierra el acceso lateral y se establece un flujo de circulación de entradas por puertas delantera y trasera, con el aforo reducido a un tercio. Ese mismo porcentaje se fija para visitas a museos, centros de interpretación y otros lugares públicos de interés total, como son las instalaciones deportivas, mientras que en las bodas civiles se establece un tiempo máximo de 35 minutos para la ceremonia tanto en el salón de plenos como en el patio del Palacio de los Condes de Santa.

El Ayuntamiento fecha para el 21 de septiembre la recuperación del servicio de limpieza y desinfección de calles y espacios públicos, con especial atención a los alrededores de centros de salud y residencias, con maquinaria agrícola contratada con una frecuencia, en principio, de una vez a la semana como complemento a los trabajos de desinfección practicadas a diario por el personal de Servicios Operativos.

El nuevo decreto municipal introduce también la intensificación de dispositivos puntuales de control de alcoholemia y estupefacientes en zonas de especial concentración de personas, con singular incidencia en tramos horarios y zonas del término municipal proclives a la realización de fiestas privadas en campos.

En relación a la actividad que desarrollan las profesionales de los Servicios Sociales Municipales, se decreta la suspensión temporal de las visitas a domicilio, a excepción de las derivadas del programa de intervención individual -PIA- y en materia de igualdad y violencia de género, se suspende la actividad grupal y actividades de formación para usuarias. Las Comisiones Informativas y las sesiones plenarias se celebrarán bajo la modalidad no presencial, a través del sistema de videoconferencia.

“Limitación de los contactos interpersonales”, principal recomendación

En el plano de las recomendaciones, el decreto suscrito por el alcalde lucentino incorpora una serie de medidas a adoptar o vigilar por parte de grandes superficies, comercios y otros establecimientos, a los que se les insta “a procurar un riguroso control de aforo que permita mantener en todo momento la distancia de seguridad entre personas”.

Asimismo, se recomienda a los centros residenciales y asistenciales de personas con discapacidad, trastornos de conducta o mayores, y centros de día, soliciten a la Consejería de Salud y Familias la oportuna autorización para suspender temporalmente las visitas de familiares.

Igualmente, Juan Pérez insiste en perseverar en la responsabilidad personal y colectiva para cumplir las recomendaciones higiénico-sanitarias y hace un llamamiento al confinamiento al señalar “la limitación en los contactos interpersonales, salvo excepciones por razones debidamente justificadas”, como un sistema de “control más eficaz y rápido de una situación sanitaria que amenaza con escenarios epidemiológicos ciertamente preocupantes”.

Por último, el primer edil solicita la colaboración de la ciudadanía lucentina para “evitar, en la medida de lo posible, cualquier perjuicio a la actividad económica, motor de desarrollo y progreso en nuestra ciudad, y contener el avance de la pandemia para afrontar con mayores garantías sanitarias la nueva etapa académica y de actividad empresarial, comercial y emprendedora que se presenta para el próximo otoño”.