Nueve trabajadores de Aguas de Lucena, cinco mujeres y cuatro hombres, han anunciado su intención de acudir a los tribunales en defensa de sus derechos salariales y han acusado a la consejera delegada de la entidad, Mamen Beato, de realizar afirmaciones falsas en relación con su categoría profesional.
En nombre de los empleados afectados, Barbara Carrillo, secretaria general de UGT, ha dejado claro que son personal laboral de una empresa mercantil con capital social 100% municipal. Tras esta aclaración, Carrillo ha negado que pretendan subir de categoría laboral sin pasar por un proceso selectivo tal y como indicó Beato. En este sentido ha argumentado que su grupo profesional es de auxiliar administrativo y que en 2007 pasaron de nivel 7 a nivel 5.
Carrillo ha expresado el malestar causado a sus compañeros cuando Mamen Beato expresó cifras económicas tal vez con la intención de dejar al colectivo afectado ante la opinión pública como trabajadores “pretenciosos” y ha añadido que llevan perdiendo dinero desde hace años y que lo que se pretende ahora es equiparar sus salarios en lugar de incrementarlos tocando además el salario base, una práctica ilegal a tenor del Estatuto Básico de los Trabajadores.
La representante de UGT también ha aludido al conjunto de grupos políticos con los que han mantenido distintas reuniones. Al respecto, Carrillo ha indicado que, en privado, les han dado la razón mientras que en público su opinión ha sido distinta. Ante esta situación, los trabajadores explican que se ven abocados a acudir a los tribunales, sin descartar plantear una huelga, como ya ocurriera hace años con dos juicios que ya ganaron.
Para Carrillo, los trabajadores no tienen que negociar con el delegado sindical sino con la empresa y considera que el proceso seguido ha sido una falta de respeto y una humillación además de acumular un cúmulo de irregularidades.
Cabe significar, según han indicado los empleados afectados, que la mesa negociadora del actual convenio estaba representada por Miguel Villa, Mamen Beato y el delegado de personal en nombre de CCOO, y que Villa presentó su dimisión al entender que las reivindicaciones de los trabajadores contaban con base legal.
Finalmente, Carrillo ha destacado que a CCOO se le olvida que en el acta donde quedan reflejados los puestos espejo a los que quieren equipararlos no aparece su firma como anterior delegada de personal.
