37 personas han pasado por la casa de acogida de Lucena Acoge desde su apertura hace dos años

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La presidenta de Lucena Acoge, Sierri Cabello, destacaba la importancia de este servicio que se ofrece a estas personas que huyen de sus países por guerras, problemas políticos o religiosos, donde incluso sus vidas corren peligro. En Lucena, son atendidos durante un tiempo hasta que se trasladan a otros lugares. Actualmente en la casa de acogida de Lucena  residen una decena de varones.

Con motivo del día del Refugiado, Lucena Acoge,  ha celebrado un acto en la Casa de Los Mora donde han participado personas de la talla del Juez Decano de Lucena, Esteban Rondón, el cronista oficial, Arcángel Bédmar, el Alcalde, Juan Pérez, la concejal delegada de Servicios Sociales, Teresa Alonso, el presidente de Luceria, Francis Díaz o el periodista de la Cadena Ser, Manuel González. Todos ellos desglosaban las vivencias y vicisitudes de refugiados que han llegado a Lucena, muchos de ellos con carreras universitarias.

En el manifiesto con motivo del Día Internacional de las Personas Refugiadas se destaca que actualmente existen más de 22,5 millones de personas refugiadas alrededor del mundo según ACNUR. Todas ellas, se han visto obligadas a abandonar sus hogares al ver amenazada su vida por conflictos armados y violencia o por ser perseguidas por su etnia, religión, nacionalidad, opinión política o pertenecer a un determinado grupo social o de género.

Las rutas de huida que inician están llenas de riesgos que amenazan constantemente su vida. Durante el trayecto se enfrenta a redes delictivas y grupos armados. Naciones Unidas considera la situación actual “una grave crisis humanitaria y de derechos humanos caracterizada por una enorme pérdida de vidas humanas a nivel mundial, un régimen de impunidad para los autores de estos hechos y una tolerancia general de esas muertes”.

Ante ello, solicitan a los gobiernos que adopten políticas de gestión migratoria que pongan en el centro el respeto y la protección el derecho a la vida de las personas refugiadas y realicen una profunda revisión del sistema de asilo y acogida para garantizar los derechos de las personas solicitantes de asilo.