SEMANA SANTA 2021
VIERNES SANTO
Aunque a las seis las puertas de la Capilla se abrieran y no se recortaran tus cuatro faroles iluminando ténuemente tu rostro mientras un llanete contiene la respiración, a punto de explotar en un Viva atronador a Nuestro Padre, aunque la saeta de las seis de la mañana no sonara desde el balcón de la espadaña de San Pedro Mártir y la Aurora no llegara por la calle que tiene el nombre de tu madre niña ni la espadaña de Santo Domingo se recortara en un mágico contraluz, aún cuando subiendo la calle de la Torres ante la inminente Cuesta del Reloj desde donde al llegar a la Plaza Nueva el sol bañe tu rostro a las ocho de la mañana cuando se estremece la tierra y los cielos ante el rezo del miserere y el perdón y tu primera bendición, aunque la estrechez de la calle flores no bese tus faroles ni la capilla de los Dolores se abra para recibir mansa pesadumbre y por ballesteros el sol no clave sus ballestas en tu espalda de luz bañada y la calle de las Mesas no vea tu discurrir hacia el gólgota de un solo horquillo ni el coso enmudezca ante tu segunda bendición y la saeta en los sones de la banda de música no te brinde su ofrenda ni la difícil vuelta de la Purísima congregue a los santeros de Lucena para ver la perfecta maestría de la santería ni por el casino el quejío flamenco de una saeta se desgrane ni los trajes nuevos se luzcan por la calle del Peso con las primeras copas de vino del mediodía y aunque falte la disputa de la marea morada para sentir tu dulce peso por Dios Padre y el último toque del torralbo anuncie tu última bendición antes de que vuelvas a la capilla a las dos de la tarde, aunque todo eso nos falte este año lo que nunca faltará será la fe y la devoción derramada, en un río constante de lucentinos que han ido a encontrar tu triste mirada y tu eterno consuelo desde las seis de la mañana, sin faltar el tambor, el torralbo, la saeta y la fe sincera y verdadera y un ¡Viva Nuestro Padre! en lo más profundo del corazón y con las lágrimas asomando.
Es Viernes Santo en Lucena, poco más hay que añadir salvo un !Viva Nuestro Padre!
Para Lucena, para ti, vendrá un 2022 y un nuevo Viernes de Lucena.