El Consejo de Ministros aprueba hoy el decreto que elimina el uso obligatorio de las mascarillas en interiores después de casi dos años. El uso de este recurso dejará de ser obligatorio a partir de mañana 20 de abril, en la mayoría de espacios.
No obstante, las mascarillas continuarán siendo de uso obligatorio en todos los transportes públicos, incluido el avión, el barco o el tren. También en centros y establecimientos sanitarios, así como en centros sociosanitarios o residencias. La utilización en estos espacios es “absolutamente imprescindible”, según la ministra de Sanidad, Carolina Darias, por el alto riesgo de transmisión o el peligro que puede entrañar un contagio.
En las farmacias también habrá que seguir usando mascarilla, debido a que se considera como un establecimiento sanitario. Dentro de estos espacios también podrían entrar las clínicas de fisioterapia, dentistas o gabinetes psicológicos.
El decreto no obliga, en general, a seguir utilizando esta medida de protección en el trabajo. Será algo que decidan los servicios de prevención de riesgos laborales en función de las condiciones de cada espacio. Los expertos de la Ponencia de Alertas que asesoran al Ministerio y a las comunidades recomiendan continuar llevándola si hay mala ventilación o no se alcanza una distancia mínima entre los trabajadores.
En el caso de los colegios e institutos, la recomendación de los técnicos es que no se use, salvo en el caso de profesorado vulnerable. La Asociación Española de Pediatría lleva tiempo solicitando la retirada de la mascarilla en los centros educativos. Su postura, que generó bastante debate, pasaba incluso por retirar antes las mascarillas en los colegios que en la población general.