Finalmente hoy ha sido la fecha fijada para la entrega de los materiales aparecidos en el yacimiento arqueológico de la Cueva del Ángel en las campañas 2013 y 2016 a la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía.
El secretario de la Fundación Cueva del Ángel, Francisco López Salamanca y el antropólogo y miembro del equipo de investigación, Francisco Bermúdez eran los encargados de dar lectura al escrito remitido por el presidente de la Fundación, Cecilio Barroso que por problemas de salud no ha podido comparecer ante los medios.
Bermúdez, detallaba, que el retraso en la entrega de los materiales se ha debido a varios factores,”siendo el fundamental la propia investigación de los huesos, ya que según establece las propias normativas de la Consejería de Cultura, este depósito de los materiales debe ir acompañado del inventario de los restos, lo que implica el estudio de cada uno de los huesos que forman parte de la colección”.
Igualmente, apuntó, “la Fundación ha estado esperando respuesta a la petición de dotar al silo de cereales, lugar donde se ubicarán las piezas, de frigoríficos, para la conservación óptima del ADN antiguo, detectado en porcentajes importantes en dichos huesos”. Desde el equipo de investigación abogan por la responsabilidad de la consejería de Cultura de preservar el patrimonio genético de los ancestros de las poblaciones actuales.
El secretario de la Fundación, Francisco López Salamanca, reprochaba al Ayuntamiento de que no se haya hecho nada para evitar que este ADN se vea dañado, indicando, que es una irresponsabilidad grandísima que se pierdan esos materiales, con el único objeto de verificar las piezas del inventario.
La colección de huesos humanos que llegará a Córdoba está integrada por 5.750 piezas inventariadas y guardadas en 93 cajas y 584 bolsas. Cada pieza posee un número de registro y una etiqueta plástica con los datos de identificación.
Por otro lado, informaban a la opinión pública de que la Fundación ha presentado una propuesta de investigación con el objetivo de desbloquear la actual situación y reiniciar los trabajos en el yacimiento este mismo año. El nuevo equipo, explicaba Bermúdez, estaría integrado por 45 investigadores con la ausencia de Cecilio Barroso, debido a su propia voluntad. Como directora del proyecto actuaría la prestigiosa prehistoriadora francesa, Sophie Gregoire, quien ya ha participado en campañas de investigación en el yacimiento lucentino.
Además, el antropólogo, Francisco Bermúdez, indicaban que no se oponen a la participación de la Universidad de Córdoba, tal y como propone el propio ayuntamiento.
Con respecto a la memoria de investigación que también debe entregar Cecilio Barroso a la Junta de Andalucía, explicaban que ya se presentó una memoria a la administración autonómica en el año 2019 que fue rechazada en su integridad por los técnicos de la Dirección General sin que ninguno de sus numerosos capítulos fuera admitido. A raíz de ahí optaron por reiniciar de nuevo la elaboración de la memoria, que se encuentra ya concluida con unas 2.000 páginas de información. Bermúdez, explicaba que su entrega se ha retrasado a la espera de solucionar el futuro del Proyecto de Investigación de la Cueva del Ángel, que según indicó, se encuentra paralizado no sólo por no haber entregado este documento, si no también por las condiciones en las que se encuentra el yacimiento con una chapa que sirve de cubierta, y que hace que la Junta de Andalucía prohíba que se puedan desarrollar más excavaciones en esas pésimas condiciones.
