La nueva empresa propietaria del antiguo hotel Prestige continúa trabajando a marchas forzadas para la adaptación de las instalaciones como espacio hospitalario. El pasado viernes, responsables sanitarios del hospital Infanta Margarita de Cabra realizaron una visita a esta infraestructura al objeto de evaluar las posibilidades que ofrece para su adaptación a las necesidades sanitarias que pudieran surgir en los próximos días.

En este sentido, cabe significar que los responsables sanitarios manifestaron que la mayor frecuentación de pacientes se prevé a partir del jueves de esta semana por lo que se están intensificando las labores de adaptación en previsión de que a partir de ese día pueda produciré la llegada de pacientes a estas instalaciones.

Durante la mencionada visita se acordó que el espacio que ofrece mejores garantías es el salón de actos que podría convertirse en un improvisado hospital de campaña. De manera paralela se evalúo la situación de las habitaciones de las que se haría uso en el caso de pacientes que pudieran caminar o en su defecto ser trasladados en silla de ruedas toda vez que el ascensor del antiguo hotel no está adaptado para el acceso de camillas.

No obstante, en las habitaciones se está trabajando en la eliminación del sistema de apertura de puertas mediante tarjeta, fórmula habitual de entrada a las habitaciones en los hoteles que utilizan este mecanismo a modo de llave, para el caso de que fuera necesario su uso.

Hasta el momento, todos los trabajos de adecuación se están desarrollando por cuenta de la nueva empresa que adquirió este hotel sin que haya recibido colaboración de administración alguna para afrontar esta inversión.