Durante el cuarto fin de semana de Cuaresma, la Cofradía Franciscana de la Pasión viene celebrando el triduo en honor de sus amantísimos titulares.
Bajo el coro del cenobio franciscano, como viene siendo habitual en los últimos años, se dispone todo el aparataje que la hermandad ha dispuestos en torno a sus imágenes titulares, el cual está presidido por la imponente imagen, joya de nuestra ciudad, de Nuestra Señora de las Angustias, atribuida al imaginero valenciano Blas Molner. Bajo las plantas del grupo de la Piedad se presenta al pequeño pero bellísimo crucificado de la Pasión y se flanquea a ambos lados por la titular mariana de la hermandad, ataviada de hebrea, y que da nombre a la franiscana cofradía y al otro lado el Señor Cautivo de Medinaceli.
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